13 de febrero de 2012

Contra la moral del esclavo

(...) Y cuando veas una iniquidad y la hayas comprendido -una iniquidad en la vida, una mentira en la ciencia o un sufrimiento impuesto por otro- rebélate contra la iniquidad, la mentira y la injusticia . ¡Lucha! La lucha es la vida, más intensa si la lucha es más viva. Y entonces habrás vivido, y por algunas horas de esta vida no darás años para estar vegetando en la podredumbre del pantano”.

Piotr Kropotkin

3 de febrero de 2012

De mayor quiero ser sumiso

Desde la ventana de mi habitación tengo unas maravillosas vistas de uno de los muchos colegios que salpican la geografía de Madrid. No serán las mejores vistas en el sentido poético de la palabra pero desde luego son totalmente reveladoras sociológicamente.

Lo más molesto de tener por vecino a un colegio no son las eternas doble filas o los incesantes claxons de los coches a la hora de la salida, ni siquiera los gritos de las niñas y niños. Lo más duro de asomarme a la ventana y tener un colegio enfrente es observar a tantos niños y niñas reproduciendo invariablemente los patrones de esta sociedad.

Saber que dentro de esas aulas los pupitres se convierten en ataúdes de sueños, que cientos de niños están siendo educados en la violencia de la dominación y cientos de niñas acostumbradas a ser sumisas y conformarse con la políticamente correcta paridad que nos ofrecen los políticos, aprendiendo que en este mundo mandan los malos y que se conviertan en futuros cabrones en vez de crecer queriendo cambiarlo, saber que el ejemplo de valores transmitido es el de futbolistas analfabetos, niñas y niños interiorizando las expectativas de futuro que les ofrece este sistema inhumano para que el día de mañana, una vez frustrados, asuman su condición de ganado. En definitiva lo más doloroso es observar como el triunfo de este sistema educativo es el fracaso escolar.

Necesitamos replantearnos la educación, porque jamás debemos olvidar que la educación es la base y por eso no nos debe extrañar que sea lo que más se esfuerzan en destruir. Ante las imposiciones del poder, alternativas humanas.